Recibiendo creatividad desde todo el mundo, Hong Kong avanza hacia el futuro
En Hong Kong, uno de las ciudades neurálgicas de Asia, creadores de nivel mundial se reúnen de forma inevitable. Gracias a esto, el punto de vista de la ciudad en sí crece naturalmente. Una cultura única, formada por la entremezcla de locales y extranjeros, crea una atmósfera caótica en Hong Kong. La calidad que ha sido forjada en este caos, está llegando a su madurez.
La ciudad de Hong Kong, desarrollada a partir de la explotación de las montañas, está llena de cuestas y escaleras. En algunos lugares, hay casos en los que aparece en plena calle un elevador público. La ciudad no solamente se amplía de forma transversal, sino que también de forma horizontal. Hong Kong, es literalmente una ciudad de tres dimensiones.
El PMQ fue usado como la residencia de la policía, después que la escuela central, en la que había estudiado Sun Yat-sen, fuera demolida. Las tiendas perfectamente alineadas, le dan un hermoso aspecto a Hong Kong.
Detrás de la moderna calle principal, aún se puede encontrar con el Hong Kong de “antaño”. Los productos alineados fuera de las tiendas, carteles vívidos, puestos de venta de comida en las esquinas… A primera vista, parece que no hay armonía, pero de manera fantástica encajan perfectamente con el paisaje citadino.
La imágen clásica de Hong Kong, con carteles “casi tapando el cielo”, poco a poco se ha ido perdiendo. Aún así, el Hong Kong tradicional, no solo atrae a los turistas, sino que proyecta el día a día de los residentes. La gente de Hong Kong, no tiene temor en aceptar los cambios, pero las costumbres locales están firmemente arraigadas.
En Hong Kong, no solo se pueden apreciar las obras de artistas famosos en las galerías y los museos, sin que también se pueden apreciar en restaurantes franceses y otros. La espectacular sensibilidad, particular de Hong Kong, aumenta proporcionalmente la calidad del restaurante. Es muy particular de Hong Kong, poder apreciar el arte mientras se disfruta la comida.
Al caminar por la calle, uno se topa con graffiti y arte callejero, que se fusionan muy bien con el caos de Hong Kong. El PMQ, actualmente está convocando activamente a escritores y artistas jóvenes, además de ser un lugar en el que se reúnen tiendas de creadores y diseñadores, un punto de encuentro de los que se apasionan por la cultura.
Desde SoHo hasta Lan Kwai Fong, la zona de diversión es conocida porque nunca duerme. Asiáticos y occidentales, locales y turistas, disfrutan la atmósfera juntos, en bares y restaurantes de estilos de todo el mundo. De cada rincón del lugar rebosa de energía.
Recientemente, muchos restaurantes están estableciendo nuevos conceptos. Por ejemplo un establecimiento está decorado completamente con figuras de mariposas o uno decorado con pinceles, dándole un acento especial al interior. Establecimientos que en la fachada parecen tiendas de sellos tallados o inclusive una compañía ferroviaria, pero con una puerta secreta hacia el bar o restaurante. Una ciudad que nunca se termina de explorar.
¿Qué es lo que creadores de nivel mundial
crean a partir del caótico Hong Kong?
Hong Kong ha sido por largo tiempo, la ciudad nodal de Asia por excelencia. Aquí se reúnen, pero también se expanden los artículos y las personas de todo el mundo. Se reúnen hongkoneses, chinos, asiáticos, occidentales, es decir muchas etnias de todo el mundo, viven juntos y desarrollan negocios. Hong Kong ha recibido muchos extranjeros en su profundo, pero amplio crisol, yuxtaponiendo su estrecho territorio con su amplia creatividad.
Chris de Eight Partnership, oriundo de Noruega, no solo trabaja con clientes hongkoneses, sino que también grandes trasnacionales, como Cathay Pacific con quien trabajó el cambio de imagen corporativa. Chris recalca que “Hong Kong es lo mejor de Asia. Actualmente, la ciudad atrae a los creadores, porque se puede elaborar las obras dando rienda suelta a la creatividad, aún mejor que New York o Londres. Desde los últimos 5 años, se hace cada vez más fácil el ambiente para la creación”.
Los hongkoneses, tienen una habilidad especial para sobrepasar las paredes de todo el mundo. Como en el caso de Gina Wong, ella pasa la mitad del año en Londres, buscando cintas independientes de buena calidad de todo el mundo. Gina dice que “Películas que son censuradas en China, puedes verlas en Hong Kong. Quiero crear más oportunidades para que la gente pueda ver cine independiente”, en su afán de expandir el arte vanguardista e Hong Kong.
“En Hong Kong, hay mucha gente que quiere cambiar el status quo”, nos comentan Marc Brulhart de Suiza y Roberto Davolio de Italia, ambos conforman el proyecto AWAWA, para crear estructuras de madera sin usar partes metálicas, a través del método tradicional japonés. El concepto de “Sostenibilidad”, aún no está muy difundido en Hong Kong, pero está cerca el día que se le dará la importancia adecuada. “Mucha gente que tiene en diversidad de cosas. En Hong Kong, siento que todo es posible”.
Obviamente también hay japoneses participando activamente. Eiichi Kunitomo de “OMOTESANDO KOFEE”, quien no cambia para nada su estilo, aún estando en Hong Kong nos dice: “Creo que no tiene sentido si no entrego el mismo estilo de café original de Japón”, además agrega: “En Hong Kong hay muchas personas que saben lo mejor de los estándares mundiales, creo que la sensibilidad japonesa es similar”. Hong Kong tiene la magnanimidad de recibir y aceptar la alta calidad mundial. La contraparte de ser una ciudad nodal, en donde todo viene de fuera y luego todo fluye hacia fuera, es que no hay algo que pudo echar raíces. Sin embargo, en los últimos años, la manufactura se ha vuelto más activa. Dentro de la esencia caótica, característica de Hong Kong, nace una sofisticada creatividad de estándar global.