Se está arraigando en Hanói las raíces del espíritu artesano y el orgullo japonés.
La fábrica de KAI Vietnam, donde Tam trabaja, está a 30 minutos manejando desde Hanói. KAI Vietnam abrió la planta hace nueve años y desde su llegada a KAI Vietnam, descubrimos que los empleados trabajaban duro para producir la mercancía de KAI. Ellos son la clave para llevar la artesanía vietnamita al siguiente nivel.
¿Cuáles son sus creencias con respecto a la artesanía?
¿Cuáles son sus creencias con respecto a la artesanía?
Foto superior/Proceso de encajado de máquinas de afeitar de dos hojas con recubrimiento de titanio. La revisión es estricta, las miradas buscan exhaustivamente si la hoja no tiene pequeñas raspaduras. Abajo/Para pulir el cortauñas de pinza hecho de acero, se necesita una técnica de precisión. Foto de la derecha/Aproximadamente la mitad de las rasuradoras para cejas “CAN ML”, se producen en la planta de Vietnam. Izquierda/Al principio, la planta se inició con la producción de cortauñas, sin embargo en la actualidad también produce tijeras y cuchillos. La maquinaria para procesamiento en calor ha sido traída desde Japón. 
En el comedor de la planta hay una mesa de ping pong. Los trabajadores repiten siempre: “¡La hora del almuerzo es para jugar al ping pong!”. Todos los años se lleva a cabo el campeonato copa KAI, en el campo de fútbol de la planta. Es un gran evento en el que participa todo el personal. 
Los últimos pasos en la creación de cortauñas de acero inoxidable. Se hace una verificación detallada de la existencia de ralladuras, capacidad de corte de la navaja, y el ángulo del asidero. El sublider que estaba jugando hace un momento ping pong, ahora parece otra persona insertándose concienzudamente en el trabajo.
La edad promedio de los trabajadores en KAI Vietnam es de 28 años. El 60% de todos los empleados son mujeres. El legado de Japón a Vietnam, el espíritu de “Consideración”, continúa por más de 100 años.
Desde la derecha: El gerente de producción Takeo Tsutsui, gerente de planta Yoshinari Kawai y el subgerente Shinichi Okuda; frente a la fábrica de Vietnam. KAI Vietnam comenzó sus operaciones en el 2006 y desde entonces han enviado varios candidatos a posiciones de liderazgo a una capacitación de un año a la fábrica KAI en la prefectura de Gifu. El sublider Chuong, fue a su capacitación hace seis años y dice que aprendió cómo pensar como un artesano (p.18, al centro en la foto de 3 personas). El alma de KAI es el espíritu del herrero. Esta filosofía fuerza a uno a considerar la psiquis y propósito del consumidor para crear el mejor producto posible. Es importante imaginar cuando y para qué propósito será usado el producto.El negocio del KAI Vietnam, ha venido creciendo constantemente y el número de empleados ha crecido desde 60 a 774. Uno puede imaginar cuán difícil debe ser gestionar a todos. Sin embargo, el gerente de la fábrica Yoshiari Kawai, está aliviado al saber que los futuros líderes de la compañía, como Chuong transmiten el espíritu de la artesanía a sus colegas.
El gerente de producción de KAI, Takeo Tsutsui, dice que menos del 0.1% de lo producido es defectuoso. La visión de artesanía de KAI ha sobrevivido en Japón por más de 100 años. Ahora, esa semilla se ha esparcido a Vietnam, donde está creciendo muy bien.
Desde el comedor de la planta
“Nuestra cafetería sirve, pollo frito de calidad, el cual es lo suficientemente agradable como para competir con algunos de los más importantes restaurantes en Hanói”, alardeó uno de los gerentes de la fábrica quien está familiarizado con la cocina vietnamita. Formamos una línea en la cafetería, recibimos una bandeja de almuerzo, y le damos una mordida al delicioso pollo. Es crocante en la superficie y jugoso por dentro, con mucha salsa sabrosa. ¡Él tiene razón! ¡La calidad es la misma como en la mayoría de los más populares restaurantes de pollo frito en Hanói!
La cafetería de 600㎡ está abarrotada con gente. Una dulce y jugosa sandía se sirve casi todo el año.
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